El otro día fuimos a las Jornadas Gastronómicas de la Matanza que organizan en La Hacienda de Campoamor y la verdad es que se pasa un día muy agradable, además como el tiempo acompaño, se puede decir que el resultado fue muy bueno.
La jornada empieza sobre las doce de la mañana, a la entrada y tras pagar 39 Euros, te invitan al "desayuno" consistente en bollos de hojalde y licores (orujo, aguardiente, vino dulce, etc.), una vez pasado este primer "control" te facilitan las herramientas para la jornada, es decir, pañuelo, delantal y cuchara y tenedor de madera.
Una vez bien pertrechados pasa a los jardines donde tiene preparadas mesas con sus platos, servilletas y cubiertos, unas barbacoas de dos por dos metros y unos mostradores donde tienes chorizo casero, butifarra, chistora, morcilla, panceta adobada, torreznos, etc. etc., tu vas con tu plato pides lo que te apetece y a la barbacoa a preparártelo a tu gusto, puedes repetir las veces que quieras.
En este punto es donde se diferencian los novatos (nuestro caso) de los que ya tienen más experiencia, los ves pertrechados con sus pinzas o su pequeñas parrillas, para preparase las viandas. Para beber tienes barra libre con vino, cerveza, sangría y refrescos, el vino si quieres te lo ponen en porrón, para que sea más rustico todo. Después de un rato largo, pasan bandejas con caldo o sopa castellana y en las mesas ponen picadillo y magro en adobo. Mientras estas comiendo, hay un grupo que va tocando y bailando jotas y canciones populares con dulzaina y tambor, también puedes ver como se hacen los chorizos y hacerte fotos con algunos lechones que tienen.
En este punto es donde se diferencian los novatos (nuestro caso) de los que ya tienen más experiencia, los ves pertrechados con sus pinzas o su pequeñas parrillas, para preparase las viandas. Para beber tienes barra libre con vino, cerveza, sangría y refrescos, el vino si quieres te lo ponen en porrón, para que sea más rustico todo. Después de un rato largo, pasan bandejas con caldo o sopa castellana y en las mesas ponen picadillo y magro en adobo. Mientras estas comiendo, hay un grupo que va tocando y bailando jotas y canciones populares con dulzaina y tambor, también puedes ver como se hacen los chorizos y hacerte fotos con algunos lechones que tienen.
Sobre las dos y media o tres, pasas a los salones que tienen preparados para comer, aquí tipo boda tienes de primero patatas guisadas con costillas o judiones con rabo y oreja, de segundo cochinillo asado que trocean delante de todos los asistentes al estilo Segovia, es decir con plato y después este va a estrellarse contra el suelo y de postre pudin de la casa, todo ello con vino, agua, casera o refrescos, cafe, té o infusiones.
Antes de empezar a servir la comida, piden voluntarios de ambos sexos y a cada uno de dan un número. Mientras sirven los postestres y los cafes, llaman a todos los niños que tienen entrada y les dan un regalo consistente en una bolsa de viaje llena de regalos, camiseta, gorra, vasos, palas de playa, etc. Después llaman a los voluntarios del principio para ....... bailar una jota, entre todos los que se han apuntado y tras atenta inspección por parte de los jueces, se elige al rey y a la reina de la matanza a los que se impone su correspondiente banda. Luego sortean entre todos los asistentes (las entradas estén numeradas) diversos regalos, unos cuarenta aproximadamente (vasos, vino, cubiteras, etc.) y después de todo esto empieza el baile tipo fiesta de pueblo con su orquesta o todo y otro salón organizan otro en plan discoteca para los más jovenes.
En resumen un sitio agradable, muy bien organizado, donde pasar un día agradable y divertido y si el tiempo acompaña como fue en nuestro caso, queda bastante mejor.