Teguise es la antigua capital de la isla, situada en el centro, se trata de una ciudad muy bien conservada en la que se mezclan los restos históricos con las construcciones típicas canarias. En sus edificios se mezclan el color de la piedra volcánica y el blanco de sus paredes creando un conjunto pintoresco. Se puede pasear tranquilamente por sus calles entrando en las distintas tiendas de productos artesanos que en ellas se ofrecen. Merece la pena visitar la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, el Castillo de Santa Barbara y el Palacio de Spinola.
Los domingos por la mañana el pueblo se transforma y la tranquilidad se cambia por el bullicio del mercadillo popular que ocupa casi todo el pueblo, al mismo acuden gentes de casi todos los rincones de la isla, así como innumerables turistas ,cuenta con más de 1.500 puestos, en los que pueden adquirir productos de artesanía popular (objetos realizados con tierra o con lava) ropa típica, bordados y productos de la tierra hechos con aloe o bien los típicos quesos o vinos de Lanzarote .
Si tenéis oportunidad visitar este pueblo.
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