Vamos a internar describir lo que hicimos a lo largo de los tres días que permanecimos en Venecia. El primer día llegada al aeropuerto "Marco Polo" (que otro nombre le podían poner), nos recoge el autobús y camino de la ciudad. Llegamos y la primera sorpresa, tienen preparado un taxi de agua para llevarnos al Hotel, que estaba al lado de la Plaza de San Marcos (lo separa un canal). La primera impresión es "curiosa" eso de ir por el agua en lugar de por una calle asfaltada la verdad es que llama la atención, en el recorrido te vas dando cuenta de lo curioso de la ciudad (pelín descuidada) y que en el agua como en el asfalto hay mucho trafico.
Una vez registrados en el hotel, nos indican que si queremos no llevan a ver la Isla de Murano por cortesía del Hotel (San Marco Palace) como no tenemos otra opción mejor decimos que sí y nos indican que a las 14:00 horas no recogen, total que nos vamos a comer algo. Según nos comentan en Italia en general los horarios son distintos a España, la comida desde las 13:00 a las 15:00 horas y las cenas desde las 19:00 a las 21:30 horas.
Tal y como nos habían indicado, nos recogen en un taxi y nos lleva a Murano, el viaje dura unos 20 minutos, nos enseñan una fabrica de vidrio y una demostración de como hacen una copa soplando el vidrio, luego recorrimos la exposición de la fábrica en la que tienen algunas piezas que son impresionantes. El chico que nos acompaño en la visita y una vez finalizada la misma nos pregunto que si queríamos volver a Venecia o por el contrario queríamos quedarnos dando una vuelta por Murano, pero que nos aconsejaba ir a otra isla Burano, para ello coges un "vaporeto" (un autobus de agua), aceptamos la oferta y después dar una vuelta por la isla (que no tiene mucho que ver) no dirigimos a Burano.
Burano es de lo que más nos ha gustado del viaje, una isla pequeña, perfectamente cuidada, con todas las casas pintadas en colores vivos (amarillo, verde, azul, rojo, rosa, naranja, etc.) tranquila con no mucha gente paseando por sus calles y plazas, nos comentaros que en Burano se hace el "encaje al aire" o como se conoce en España el encaje de bolillos. Una vez recorrida la isla, tranquilamente en un par de horas se hace, cogimos el vaporeto de vuelta a Venecia. Si tenéis oportunidad no dejéis de visitar esta isla.
Una vez en "tierra firme" fuimos andando tranquilamente por entre las callejuelas, pasando los distintos puentes que hay para cruzar los canales que surcan la ciudad, pensar que no hay calles por donde puedan circular coches y todo el trasporte se hace en barco o a mano. Viendo las iglesias y palacios que tiene la ciudad por todas partes. .
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