En Mérida intentamos comer en Casa Benito, la verdad es que el sitio tiene buena fama de hecho estaba lleno el restaurante y al final "pinchamos" algo en las mesas que tiene fuera.
Les falla el trato con los clientes, prácticamente nos echaron no dándonos casi la oportunidad de esperar una mesa, estaban muy ocupados y si queríamos una cerveza que nos fuésemos al Bar ¡! ¿?.
No se porque, no nos fuimos a otro sitio (misterios de la mente humana), conseguimos una mesa y pedimos algo de pinchar (parrillada de verduras, plato de ibéricos y variado de carnes a la parrilla).
La relación calidad precio no es muy buena, tres raciones, dos cervezas y dos copas de vino más de 55 euros.
Es posible que a otras personas le haya ido mejor, pero yo no lo recomendaría principalmente por el trato.
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